¿Qué puede provocar menopausia precoz?

¿Qué puede provocar menopausia precoz?

Por fin sin la regla, pero…¿No es un poco pronto?

La menopausia que se produce antes de los 40 años se denomina menopausia prematura. La menopausia que se produce entre los 40 y los 45 años se denomina menopausia precoz. En cualquier caso, se trata de la desaparición de la menstruación un poco antes de lo habitual, ya que suele suceder entre los 45 y 55, siendo los 51 años la edad promedio en España. Se produce una disminución de la cifra de estrógenos y desaparece la regla. La menopausia precoz o prematura puede suceder sin ninguna razón clara, o puede producirse como resultado de ciertos aceleradores. Un 6% de las mujeres atraviesan la menopausia antes de lo usual y entre las principales causas suelen estar:

    • La herencia genética
      En muchos casos es difícil saber qué ha provocado la menopausia precoz y a veces, ocurre sin una causa justificada. Sin embargo, los antecedentes familiares influyen. Entre un 5 y un 30% de mujeres con menopausia precoz tienen un antecedente familiar con el mismo problema.
    • Cáncer o cirugías ováricas previas
      La menopausia precoz puede deberse al tratamiento con radioterapia o quimioterapia. La extirpación de los ovarios pueden ser la causa de que se acelere la llegada de la menopausia. Y en el caso de la cirugía para extirpar el útero puede finalizar la menstruación, pero no causar menopausia porque los ovarios sigan produciendo hormonas.
    • Consumo de determinados fármacos
      También puede anticiparse la menopausia por el consumo de determinados fármacos con los que estemos tratando otras enfermedades y contengan grandes dosis de hormonas.
    • Desequilibrio de vitamina D
      La relación de la vitamina D con la menopausia tiene su núcleo en el déficit de estrógenos y los desajustes hormonales que provoca. Tener niveles correctos de vitamina D puede ayudar a evitar que se adelanten desequilibrios hormonales. Es recomendable exponerse durante 10 o 15 minutos al día sin protección solar, aunque nunca durante las horas centrales del día y protegiendo el rostro.
    • Tabaco
      Las mujeres que fuman pueden llegar a la menopausia hasta dos años antes que las que no fuman y suelen sentir más sus síntomas.
    • Alcohol
      Conviene reducir el consumo de bebidas alcohólicas y no tomar más de 2 cafés al día, ya que ambos pueden provocar una menopausia más temprana.
    • Estrés
      Mujeres con niveles altos de estrés tienen un 80% más riesgo de tener la menopausia precoz. Además, intensifica los síntomas propios de esta etapa.
      Practicar yoga, meditación, realizar alguna actividad que te guste, el contacto con la naturaleza o quedar con amigos nos pueden ayudar a relajarnos. También, algunas infusiones como la melisa y la valeriana nos ayudan a disminuir el estrés y encontrar un descanso reparador.

La menopausia precoz es algo que no se puede prevenir y no podemos cambiar nuestra carga genética. Pero conocer algunas de sus causas nos prepara y podemos hacer ajustes con tiempo en lo que otros factores externos se refiere.

En el caso de ser diagnosticada de menopausia precoz es importante intentar gestionarlo de la manera más normal posible, entendiendo que es algo natural que ha llegado un poco antes. Buscar apoyo en otras mujeres que viven la misma situación y compartir experiencias puede ayudar mucho.

Además, como siempre, en Indasec® os recomendamos llevar una vida equilibrada con una dieta sana, practicar deporte, evitando el tabaco y el alcohol para así lograr tener una mejor calidad de vida y sobre todos ser FELICES y disfrutar de la vida como una auténtica EXPERTA EN VIVIR.

CONSEJOS PARA EL CUIDADO DE LA PIEL DURANTE LA PERIMENOPAUSIA

CONSEJOS PARA EL CUIDADO DE LA PIEL DURANTE LA PERIMENOPAUSIA

La menopausia no es más que el cese total de la menstruación. Qué fácil, ¿verdad? En realidad, esto conlleva una serie de cambios en el plano físico y emocional.

El desconocimiento de esta fase natural en la vida de cualquier mujer viene dado por los tabús entorno a la menopausia, la buena noticia es que cada vez más los vamos superando.

¡Así que fuera tabús! Queridas Expertas en Vivir, la información es poder y esto significa que cuanto más sepamos, mejor, así podremos anticiparnos. Como en cualquier otra etapa por la que hemos pasado, hay una serie de cosas que tenemos que aprender. Nuestro consejo: infórmate, adáptate y acepta los cambios que van sucediendo en ti con naturalidad.

Algunos de esos cambios, como la alteración en los niveles de ciertas hormonas sexuales (como los estrógenos y la progesterona), se dejan ver a nivel de la piel. Este es uno de los cambios más evidentes porque es externo y porque empieza desde la fase de transición, también llamada perimenopausia. Este periodo puede durar hasta cuatro años y es un momento genial para ir preparándonos e incorporando buenos hábitos que luego agradeceremos.

¿Qué le está pasando a mi piel?

Algunos de los síntomas de la menopausia, que empiezan a sentirse en la perimenopausia, son la sequedad y la disminución de grasas cutáneas. Esto se suma a la deshidratación, ya que la piel disminuye su capacidad para retener el agua y recibe menor cantidad de agua y nutrientes. Como consecuencia la piel se muestra más seca, disminuye su grosor y comienza a perder tersura. Incluso podría aparecer acné  a causa del cambio hormonal, sobre todo en la barbilla y el mentón. Vemos como las líneas de expresión van apareciendo y se dejan ver también algunas manchas por exceso de pigmentación.

No a todas nos afectan por igual, lo que suele ser más transversal y común en todas las mujeres es la caída de la producción de colágeno y la deshidratación.

¿Qué puedo hacer para cuidar mi piel?

Para mejorar el estado de nuestra piel y que sigamos viéndonos estupendas, aquí van unos consejitos para ayudarnos a ganar un extra de seguridad y confianza en esta etapa tan especial.

Antes aún de cuidarla, protégela del sol. Usa protección solar, pero no huyas del sol. No es nuestro enemigo, la síntesis de la vitamina D permite una buena absorción cálcica, importante para compensar la pérdida de masa ósea (otro efecto de la menopausia). Existen cremas protectoras específicas para esta etapa con un índice de protección elevado y, además, podríamos usar alguna crema despigmatizante, que aclaran o eliminan las manchas solares. Estas cremas debemos aplicarlas diariamente, no solo en verano, y podemos incluir protección extra como gafas de sol, sombreros, etc.

La hidratación es la clave. Aprovecha el tiempo en casa para beber agua, caldos, infusiones, etc. para combatir la deshidratación. También podemos ayudar a nuestra piel con un tratamiento que combine alfa hidroxiácidos, retinoides (vitamina A) y antioxidantes (vitamina C) que aceleren la renovación celular aportando jugosidad y luminosidad. En las cremas y lociones corporales es preferible elegir las que retengan la humedad y cuiden la barrera hidrolipídica de la piel para mantenerla elástica y firme.

Exfóliate regularmente. Eliminar suavemente las células muertas favorece la renovación celular y suaviza la piel.

La alimentación también ayuda, por supuesto. Seguir una dieta variada, donde predomine la fruta y la verdura, nos aporta las vitaminas necesarias y sobre todo las que tengan efectos antioxidantes como la A, C y E. La vitamina C ayuda a sintetizar el colágeno, que mantiene tersa nuestra piel.

Limita el consumo de tóxicos. Restringir al máximo el consumo de cafeína, tabaco y alcohol mejora la hidratación y absorción de la piel.

El ejercicio mejora la circulación sanguínea. Lo mejor: hacer actividad física moderada, pero constante.

Limpieza y desmaquillantes suaves. Muy hidratantes que respeten tu piel y sin jabón para que no provoquen más desecación. Evita, también, ducharte con agua muy caliente, por la misma razón.

El rey de la hidratación: el ácido hialurónico. Es capaz de atraer y retener el agua, de ahí su alto poder hidratante que da a la piel un aspecto más saludable.

Elige la rutina de piel que más te convenga, incluso puedes probar varias.
¡Cuando la encuentres ya no podrás dejarla!