Hoy nos vamos a detener en un problema urológico mucho más frecuente en mujeres que en hombres, que representa entre el 10 y 15% de las consultas que llegan a los urólogos. Las infecciones del tracto urinario (ITU), también denominadas coloquialmente cistitis,  aparecen sobre todo en mujeres de 18 a 45 años. Ligadas al inicio de las relaciones sexuales, éstas también pueden darse en mujeres a partir de 65 años, debido a la atrofia vaginal y uretral que va ligada a los cambios hormonales producidos en esta edad. Aunque no suelen suponer situaciones médicas graves, si que se sitúan entre un problema médico de primer orden debido a que pueden llegar a hacerse crónicas provocando un deterioro en la calidad de vida de la mujer.

Algunos de los síntomas de estas infecciones suelen ser el dolor intenso sobre la vejiga, el dolor y  la dificultad para orinar o el malestar general. En ocasiones, estas sintomatologías pueden manifestarse en forma de suciedad en la orina o fiebre. Las causas de la cistitis pueden ser muy variadas, desde relaciones sexuales muy enérgicas o prolongadas, hasta cambios hormonales originados por el embarazo o menopausia hasta no orinar cuando se tiene la necesidad de hacerlo. Aunque existen multitud de remedios caseros, que han ido pasando de familia en familia a lo largo de los años, que pueden funcionar mejor o peor dependiendo del caso (desde tomar tres dientes de ajo al día, hasta beber agua con cucharaditas de vinagre, manzana y miel con cada comida) es necesario tener en cuenta una serie de recomendaciones.

Algunos expertos recomiendan no usar duchas ni desodorantes vaginales que pueden repercutir negativamente en los síntomas de la cistitis. Las afectadas también deben saber que las bebidas alcohólicas irritan las vías urinarias, así como el uso de ropa interior que no sea de algodón. Un buen remedio para aliviar el dolor es aplicar calor sobre el bajo abdomen o tomar muchos líquidos. La ingesta de estos líquidos expulsará las bacterias que estén produciendo esas cistitis. Por último, es recomendable llevar al día las infecciones de la vejiga, para poder detectar qué hábitos en tu forma de vida, la están causando.

No obstante, si después de 48 horas la fiebre no ha bajado o experimentas orinas con sangre, incluso si crees que estos síntomas pueden estar originados por una enfermedad de transmisión sexual debes consultar a tu médico de cabecera.

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Fuente|Instituto Urológico IGB