Una duda que se plantean algunas de nuestras amigas en indasec.com/new es si su molesta incontinencia urinaria será heredada por sus hijos e hijas. Es una preocupación lógica, y que os puede afectar a muchas, así que vamos procurar tranquilizaros al respecto.
De entrada, vamos a recordar que la incontinencia urinaria es un síntoma. Molesto, puede llegar a ser crónico, pero sólo un síntoma, no una enfermedad en sí mismo. Lo que nos dice la incontinencia urinaria es que hay algo que no funciona correctamente, bien a nivel fisiológico, bien a nivel psicológico e incluso una mezcla de ambas patologías.
Así, sólo tendríamos que preocuparnos ni nuestra incontinencia urinaria fuera provocada por una debilidad congénita de los músculos que hacen funcionar nuestro aparato urinario. Es decir, sin por un lado fuera un problema de tonicidad de esos músculos en concreto y por otro este problema tuviera un origen congénito. Esto supondría tan sólo un 20% de los casos máximo.
Además, lo que tendríamos entonces es una predisposición a padecer la debilidad con su consecuencia, la incontinencia urinaria. De la misma manera que cuando tenemos familiares que han padecido del corazón no estamos irremediablemente condenados al ataque cardíaco sino que simplemente tenemos más posibilidades, y por tanto nos cuidamos un poquito más, con la incontinencia urinaria debemos hacer lo propio.
Si nuestro caso es de debilidad congénita, deberemos recomendar a nuestras hijas e hijos, a ellas sobre todo, que realicen ejercicios Kegel, que cuiden su alimentación y lleven una vida activa. En realidad, éste es un consejo útil para todas, pero especialmente para aquéllas que crean que pueden tener más facilidad para sufrir este molesto síntoma.
Y si aún así resultara que a ellas también les ocurriera, no se os olvide contarles cómo se puede llevar una vida perfectamente normal y plena. Nunca debemos dejar que las pérdidas leves de orina nos impidan seguir nuestro día a día. Siempre contando con asesoramiento médico, y teniendo en cuenta la existencia de unas magníficas compresas específicas, todo será mucho más sencillo. Además, os tienen a vosotras a su lado para acompañarlas y recomendarles qué hacer, ¿no es cierto?
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