Los puntos gatillo es una de las causas más frecuentes de molestias en el suelo pélvico, sin embargo, hoy en día existen multitud de formas (terapéuticas y diagnósticas) que ayudan a tratar este dolor con resultados más que satisfactorios. No obstante, para empezar, vamos a repasar los síntomas que sufren aquellas personas que los padecen. Algunos de ellos se pueden manifestar a través de disfunciones en el suelo pélvico, sensibilización del sistema nervioso central, o restricciones en la movilidad del tejido conectivo. Además, estos pacientes pueden llegar a quejarse de dolor intestinal o relaciones sexuales dolorosas.
Factores como los cambios de temperatura, el frío, o el estrés pueden propiciar que el músculo, los tejidos conjuntivos y la envoltura de esos tejidos, pierdan la elasticidad que los caracteriza. Es en este momento, cuando se acorta el músculo y la facia que lo envuelve, y se genera el dolor del que estamos hablando.
Como siempre te decimos en este blog, cada caso y síntoma debe ser tratado por tu médico de cabecera. Él, mejor que nadie, sabrá realizar un diagnóstico correcto de lo que te sucede. Entre los tratamientos que recomiendan muchos de estos expertos, están las técnicas de aguja seca, que generan efectos muy similares a los de la acupuntura. Esta técnica de punción seca, muy ligada a otros problemas que tienen que ver con el dolor pélvico crónico, es capaz de generar grandes mejoras en la musculatura del suelo pélvico del paciente.
En este método, que no se considera acupuntura, la aguja se introduce en el punto gatillo produciendo una contracción local y haciendo que el músculo se relaje. De este modo, el riego sanguíneo mejora y el paciente puede llegar a experimentar mejorías inmediatas. Este revolucionario tratamiento, que no se aplica durante más de 10-15 minutos en cada zona a tratar, puede causar molestias y dolores durante un par de días, sin embargo, pasado este tiempo, la mejora es más que perceptible.
Fuente| Salud Univisión
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