Como en los tiempos de Hamlet, cada año nos enfrentamos a esta duda existencial: ¿bikini o bañador? A pesar de habernos puesto a dieta desde el 01 de enero, de no dejarnos tentar por chocolates o tapitas, llega el calor y nos parece que nada es suficiente para estar estupendas en la playa o la piscina.
La decisión de cómo queremos mostrarnos en público con más piel a la vista de lo normal, no es una más. Intervienen muchos factores que pueden condicionar nuestra elección. Algunos de estos factores son objetivos y otros, decididamente, dependen de nuestra propia imagen corporal, de nuestra personalidad y seguridad.
Y dicho ésto, recuerdo a una de mis mejores amigas que, a sus 50, está mejor que cuando teníamos 20 (sí, Laura, estoy hablando de ti) pero que es incapaz de pisar la playa con un bikini. Y en mi misma, que las pocas veces que me he visto obligada a enfundarme en un bañador, me he sentido apretada e incómoda hasta mas no poder.
La elección de la pieza que nos acompañará durante el verano debería ayudarnos a realzar esa parte bonita de nuestro cuerpo, y a disimular nuestros puntos débiles. Pero básicamente debe hacernos sentir estupendas, guapas y cómodas.
Algunos consejos
En líneas generales podríamos dar algunas ideas para elegir entre bikini o bañador:
* Si toda tu vida has usado uno u otro, ¿por qué cambiar ahora? Mientras te sientas bien contigo misma, ¡adelante! Y si te apetece un cambio radical: este es el momento.
* Si tienes espalda ancha será mejor optar por sujetadores anudados al cuello con tiras gruesas, para destacar el pecho.
* Si tu problema es que tienes poco pecho, debes saber que sientan mejor los bikinis que los bañadores.
* En el mismo caso, hay que usar sujetadores con aros o relleno, mejor si tienen copas triangulares o cuentan con aplicaciones o adornos.
* Si por el contrario, tienes mucho pecho, debes elegir modelos con sujetadores firmes y con tiras gruesas. Son preferibles los escotes en «V», los tirantes anchos y los colores oscuros.
* ¿Tus caderas son anchas? Usa braguitas de corte ancho, tipo short o culotte, o bañadores completos. Las bragas deben ser sencillas, sin adornos ni aplicaciones, y puedes combinarlas con sujetadores estampados.
* Si lo que quieres es ocultar la tripita (que no hay forma que desaparezca), entonces lo tuyo es un bañador entallado o bikini de braguita alta.
* Para nuestras amigas con figura tipo reloj de arena, el bikini es la mejor opción, con braguitas bajas y un sujetador simple, sin recargos innecesarios.
Otras cuestiones
Ya has pasado los 20, y los 30. Los 40 te han pillado con un buen tipo a fuerza de cerrar la boca a las tentaciones, probar alguna dieta o una gran disciplina. Estás estupenda. Así debes creerlo. Entonces ¿por qué no?
¿No será éste el momento de sorprender a propios y ajenos con un bikini que muestre lo que haya para mostrar? Y después de todo ¿qué mas da? Ya sabes que no debes buscar la aprobación de nadie. Te miras al espejo y ves una mujer madura y segura. No te vistes para los demás, sino para ti misma.
En la playa o en la piscina verás mujeres maduras con una gran libertad en su atuendo. Mas allá del cuerpo que tengamos, lo que viste es la actitud, la seguridad y la personalidad. Puedes estar cubierta de pies a cabeza y ser un bombón con un poderoso atractivo, o al contrario.
Los límites los pones tú. Debes sentirte tan cómoda en tu bañador o bikini como en tu piel. ¿Te lo he dicho ya? ¡Estás estupenda!
Imagen | José Ignacio Soto
Yo lo tengo claro, bañador, me siento mucho más cómoda que con bikini.
Yo soy más de bikini, la verdad, aunque los últimos veranos estoy muy contenta con un bañador que me compré que es muy bonito y casi no me deja marcas
Chicas… con el tiempo hago mío eso de : «Menos es mas» … 🙂