Esta mañana en unos grandes almacenes, una chica muy atenta me ha parado y me ha invitado a probar un perfume. Afortunadamente ya no se estila esa mala costumbre del pasado. rociarte de aromas sin avisar, y ahora te ofrecen una tira de papel en la que poner el perfume y olerlo. La ventaja, además de no impregnarte de un olor que puede no gustarte, es que te la puedes llevar a casa y seguir oliéndola más tarde. Así estoy yo, tecleando junto a un cartoncito con aroma a violetas.

Escoger un perfume es algo complicado. Si es para nosotras, el camino es más fácil, aunque nunca sabremos de verdad si hemos acertado hasta utilizarlo durante unos cuantos días. Si tenemos que regalar un perfume a alguien, es mejor que tengamos bastante información sobre sus gustos, y sobre todo, de aquellos olores que no gustan a esa persona.

Llegadas a este punto nos preguntamos: ¿cómo escoger un perfume? Vamos a ver algunos puntos que nos pueden ayudar en este empeño.

Cómo escoger un perfume

* Hay que tomarse un tiempo para elegir y no dejarse llevar por las prisas. El primer golpe de nariz no sirve para hacernos una idea de cual es la sutileza y profundidad del perfume, por lo que es mejor que nos lo apliquemos y dejemos pasar un espacio de tiempo. Una jornada de compras en un centro comercial es un buen momento, podemos probar y volver más tarde con la decisión ya más madura.

* A la hora de probar un perfume, debemos aplicarlo en nuestra piel. Los cartoncitos están bien para hacernos una idea, pero hasta que no fundamos nuestro propio olor con el perfume no sabremos cómo resulta. Pondremos una gota sobre la la cara interior de nuestra muñeca y en el pliegue del codo, oliéndolos al menos diez minutos después de la aplicación.

* Piensa en qué ocasiones vas a utilizarlo, no es lo mismo un perfume para salir por la noche, que un aroma para ir a la oficina. Recuerda que la máxima de menos es más también se aplica en este terreno, y que quizá quienes pasan el día entero junto a nosotras agradezcan un aroma suave y fresco.

* Pide consejo a alguien cercano y estudia su reacción al oler el perfume en tu piel. Es un buen punto de partida para saber si nos estamos equivocando.

* Nuestro olor es la primera impresión que los demás tendrán de nosotros, y nos acompañará durante todo el día, de manera que no es conveniente abusar de perfumes demasiado recargados, y en ese caso, lo mejor es ser muy cautas con la cantidad. Algunas esencias necesitan tan solo dos gotas para resplandecer sin agobiar.

* Si vamos a regalar perfumes, intentemos tener una referencia de los gustos de la persona a la que queremos sorprender. Es mejor regalar esa marca a la que es fiel, que atrevernos con sándalos y jazmines. Y si lo hacemos, pidamos ticket regalo para facilitar las cosas en caso de que no sea de su gusto.

Para terminar con esta pequeña guía, os contaré que a lo largo de mi vida he tenido no más de cuatro fragancias que realmente he usado de manera continua, y cada una de ellas durante varios años seguidos en exclusiva. Una vez que doy con el aroma adecuado me cuesta mucho cambiar. Y vosotras, amigas de Sabes lo que Quieres ¿Sois fieles a un perfume? ¿Os gusta cambiar de fragancia? Contadnos vuestras experiencias, juntas vamos a desatar un torbellino de olores.

Imagen vía | Tibchris en Flickr